El Grupo de Acción Financiera sobre el Blanqueo de Capitales (GAFI) consideró necesario supervisar y vigilar a las organizaciones sin fines de lucro a través de la aplicación de un modelo de riesgo, para evitar que sean utilizadas para financiar actos terroristas. Lo anterior con el propósito de identificar a aquellas asociaciones que cumplen con su función y detectar a las de alto riesgo.
En la revisión y actualización de una de las recomendaciones que emitió y que tiene que ver con las organizaciones del sector privado, el organismo del que forma parte México, se reconoce que ese tipo de asociaciones proporcionan una gama de servicios vitales en nuestra sociedad, en particular para las comunidades vulnerables y con frecuencia en regiones de alto riesgo.
Sin embargo, los terroristas y organizaciones terroristas también pueden abusar del sector moviendo sus fondos a través de las asociaciones constituidas legítimamente, alertó.
“Esto ocurre a menudo sin el conocimiento de los donantes, la gestión o el personal, o incluso pueden caer en simulaciones para canalizar el dinero y financiar actividades relacionadas con el terrorismo”, ponderó en el documento que se dio a conocer en la asamblea del organismo.
El GAFI es el organismo internacional que emite recomendaciones en prevención y combate al lavado de dinero, al financiamiento de terrorismo y al financiamiento para la proliferación de armas de destrucción masiva.
Desde 1990 emitió las primeras 40 recomendaciones contra lavado de dinero, en 2001 con los ataques a las torres gemelas en Nueva York agregó ocho especiales para combatir el financiamiento al terrorismo y en 2012 aprobaron nuevas contra la proliferación de armas de destrucción masiva.
Además el grupo identificó que los recursos provenientes de delitos fiscales comenzaron a ser fuente del lavado de dinero, por lo que cada país, tiene la libertad de determinar cuáles son los delitos fiscales que incorporará.